sábado, 16 de febrero de 2008


Por estos días tengo la sensibilidad de una embarazada , me conmueve y me duele todo, todo me hace llorar, a solas, caminando por la calle: La miseria opacando los ojos de los niños, un anciano con pocos dientes mordiendo un pan de costado, la muerte del hijo mayor de Carlos Fuentes, las botellas vacías llenando un cajón en la puerta de un mercado chino, un perro caminando al costado de la autopista, los cordones rotos de la vereda, el sol pálido de la mañana sobre una cucaracha patas para arriba, un beso en el cine, las cejas de una mujer que nunca me amó, una patada a destiempo en el partido de los jueves, el trabajo diario que no me sale ni me deja salir, una canción de Jara, una foto digital reveladora que nunca llevé al papel, lloro por todo como si estuviera embarazado de un dolor que no logro parir.

martes, 12 de febrero de 2008


Yo se que me lo pierdo
por estar en gira de bares
por estarle poniendo siempre un vaso a un amigo
por estar tirando diagonales en la cama

Yo me lo pierdo por estarle poniendo la cola
a alguna burra,
Por estar siempre con un pie fuera de la casa
con un pie fuera del mundo ordinario.
Por no querer mirar atrás
por miedo a ver mi cuerpo muerto.

Yo me lo pierdo por ser el triste payaso,
Por ser el costado de atención.
Por estar sumergido en resacas matinales
y no en ciclos menstruales
Por estar ocupado talando este árbol genealógico
Por estar en la lista de espera de canceres e infartos.

Yo me lo pierdo por estar jugando al futbol,
corriendo kilómetro tras kilómetro
en mi bulimia deportiva
Por pardar la primera
y dejarme perder a la segunda,
Por desordenado, por incrédulo

Yo me lo pierdo por no empezar nada de lo que termino
Por estarme ganando la muerte día a día.
Por feminista
Por no querer ser salvado,
por no querer sacarle mi tajada a ninguna persona.
Ya se que soy yo el que se lo pierde,
El que te pierde.

domingo, 10 de febrero de 2008




Me me miró desnudo tendido a su lado en la cama y me preguntó:
¿ que le pasa al amor que insiste con no existir?Yo puse mi mejor cara de sabana y la tapé

jueves, 7 de febrero de 2008

Cada cosa por su nombre.


Cuando nos besamos en el umbral de la puerta del bar, caí en cuenta de cuan borrachos estábamos.
Encendió un cigallillo y comenzó a mirarme de esa manera que solo miran los ebrios y los enamorados. Yo estaba aturdido me zumbaban la ganas, la tomé por la cintura y le dije algo al oído que la hizo reír, su risa hizo estallar la noche en sus mil silencios, yo reí también.
Caminamos torpes hasta su auto y toqué la piel de sus piernas y su pecho y casi lo hacemos sobre el capot del Rover, la besaba y la lamía y no podía recordar su nombre. Me cuesta horrores recordar los nombres de la mujeres que me gustan mucho apenas las conozco, sabía que su amiga en el bar se llamaba Camila, Camila no era gran cosa, pero ella... mientras le preguntaba su nombre y me contestaba a través de la abundacia de sus labios yo estaba pensando en que iba a decirle para hacerla reír y para que se quedara conmigo y no se fuera detrás de algún tipo que valiera más la pena que yo, de esos que abundaban en el bar.
Mientras buscaba la llave en su cartera pensé que ese vestido se había inventado para ella, lo pensé y lo mantengo.
El auto olía a pedo es posible que se hubiera cagado antes de bajar y que el pedo hubiera quedado encerrado por unas horas o que se haya cagado al entrar, que importaba yo olía a vino y a marihuana, seguramente.
El encendido fue violento el coche se soltó de marcha y cabeceo intensamente.
-Perdón- , me dijo – no hay por qué, no se puede ser hermosa y estar en todos los detalles – rematé, no se por qué, pero nos reímos mucho, y volvimos a besarnos largo rato.
Yo miraba sus piernas acelerar y frenar, embargar y acelerar debajo de ese bellísimo vestido y me daba las gracias a mi mismo por estar ahí.
Venía demasiado rápido doblando en las calles internas, giraba para un lado casi en dos ruedas y finísimo a los autos estacionados, giraba para el otro subiendo al cordón, pero yo no podía decirle nada, las mezclas y la velocidad no se llevan muy bien durante la segunda hora. Cuando me mareaba un poco sacaba la cabeza por la ventana y si no me servía miraba sus piernas otra vez.
En la avenida paso todos los semáforos en rojo y se detuvo solo en uno que estaba en verde, creo que la borrachera le tenia la percepción cambiada eso justificaba que me estuviera llevando a su “casa para matarnos”, según me había dicho antes de que yo pague la cuenta.
Nuestra carrera etílica acabó con el auto saliéndose de la calle para incrustarse dentro de un negocios de venta de ropa para bebés, la vi salir despedida por el parabrisas yo no llegué a tanto pero me golpeé muy fuerte la cabeza contra el techo y es posible que uno de los dos se hubiera abollado. Increíblemente a pesar de encontrarme todo lleno de vidrios no estaba cortado, me bajè del auto por la ventanilla. Habíamos arrancado la persiana metálica de cuajo, y el Rover estaba destruido contra el mostrador del negocio, bajé desesperado, pero borracho a buscarla. No podía estar muerta, no podía, no sabía ni como se llamaba, solo sabia que íbamos para su casa a desnudarnos a “matarnos”. Había ropa y maniquíes de niños por todas partes yo tropecé infinidad de veces girando sobre mi eje buscándola, la alarma sonaba, todo andaba mal. Pensaba en los titulares de los noticieros “ auto se incrusta en un local de ropa de bebés, la conductora quien estaría alcoholizada muere en el acto, de haber sido en otro horario pudo haber sido una tragedia” Pero nadie se emborracha así como nosotros en horario laborable, imbèciles, imbeciles ! Iba a salir en todos los noticieros llamándolos imbeciles , explicando que íbamos para su departamento, que era hermosa y que no sabia su nombre... cuando de repente la vi sentada en un rincón sobre una pila de ropa, con un bebé de juguete entre sus brazos meciéndolo le hablaba muy bajo o le estaba cantando, su frente sangraba pero muy poco por suerte.
Me senté a su lado y empecé a sentir como la borrachera se me dilataba, la abracé en silencio, y ella dijo mirando al muñeco “ ahora si somos una familia” la alarma no paraba de sonar ensordecedoramente.
El poli entró furioso, como si lo hubiesen levantado de la cama para ir a ver que pasaba; y eso hizo que se ponga duro con las preguntas, pero eso no la alteró, recuedo que ella aún con el muñeco tomado de una mano declaró estar conduciendo bajo la influencia de mi amor, el poli anotó eso y empezó a hacerme las preguntas a mi, yo solo la miraba a ella y no podía recordar como se llamaba.






No por mucho bagualear se entristece más temprano.